Dios es el dueño absoluto de todo, como lo dice el
Salmos 24:1-21
“De Jehová es la tierra y su plenitud;(A) El mundo, y los que en él habitan. Porque él la fundó sobre los mares, y la afirmó sobre los ríos.
Conociendo este principio debemos entender que no somos dueños sino ADMINISTRADORES de lo que Dios nos ha dado, aun de nuestras vidas. Cuando no obedecemos o desconocemos estos principios las cosas salen mal y por eso “vamos a bancarrota” en nuestra vida.
El Señor Jesús en la cruz del calvario llevó la ruina y el pecado; dándonos con su resurrección la vida, prosperidad y bendición. Por eso nosotros con sabiduría y dirección del Espíritu Santo debemos administrar lo que Dios nos da. Pero hay principios que Dios estableció en su Palabra que al obedecerlos traen esa bendición en cada área de nuestra vida y uno de ellos es el ser buenos administradores o mayordomos de lo que Dios nos ha dado.
Leamos la “Parábola de los Talentos” en
Mateo 25:14-30
VEAMOS QUÉ PRINCIPIOS SON:
1. MAYORDOMÍA DE NUESTRO TIEMPO:
Efesios 5:15-16 dice: “Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, (B) porque los días son malos.”
En estos días de tantos afanes y ocupaciones, nos olvidamos de las cosas más importantes en nuestra vida tales como:
- El tiempo más importante para todo creyente debe ser ese tiempo que apartamos cada día para estar con Dios; de este tiempo depende nuestra bendición, dirección, guía y victorias diarias en lo que hacemos. De la misma manera, el tiempo para nuestra edificación y crecimiento espiritual cuando vamos a la iglesia.
- Debemos apartar tiempo para nuestra familia, pues como padres tenemos la responsabilidad de velar por el alma y cuidado de nuestros hijos.
- Hay pasatiempos y actividades en las que pasamos mucho tiempo y no son de mucha edificación ni bendición para nosotros. Por ejemplo: ¿Cuánto tiempo pasas viendo televisión? No es malo ver T.V. Pero debes tener cuidado con lo que ves, al igual que con el Internet y otros pasatiempos.
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2. MAYORDOMÍA DE NUESTRO CUERPO:
1a Corintios 6:19 y Gálatas 5:16-26
Ya que nuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo debemos tener cuidado de él. A veces nos despreocupamos u otras veces nos preocupamos demasiado en nuestro cuerpo.
- Hay algunas cosas que debemos tener en cuenta en el cuidado y administración del cuerpo:
- Evitar glotonerías, dietas rigurosas o gula que dañan el metabolismo del organismo.
- Acupuntura, naturismo y homeopatía son ciencias orientales que atan nuestro cuerpo con enfermedad. El haber ido a espiritistas buscando sanidad (lee Deuteronomio 18:9)
- Lujuria, pornografía, masturbación y fornicación son pecados que atan nuestras vidas. No olvides que Dios es nuestro sanador y Él puede sanarte sobrenaturalmente en el nombre de Jesús o usar la medicina científica la cual no compromete tu FE.
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3. MAYORDOMÍA DE LOS BIENES:
¿Quién pensaría que podemos robar a Dios? Pues la verdad es que si, ya que todo le pertenece a Dios y el sólo demanda que le devolvamos el 10%. Si de verdad quieres ver bendición en tu vida es necesario que pactes con Dios como lo hizo Jacob en Génesis 28:20-22 .
Jacob PACTÓ CON DIOS y Dios lo bendijo abundantemente.
-¿QUÉ ES EL DIEZMO?
Es un mandato de Dios para su pueblo y consiste en apartar el 10% de todo lo que recibes para después traerlo al lugar donde recibes el alimento espiritual, es decir nuestra iglesia.
Lee Malaquías 3:8-12.
-¿QUÉ ES LA OFRENDA?
Es lo que con gozo y alegría das al Señor voluntariamente para el sostenimiento de la iglesia.
BENDICIONES DE DIEZMAR Y OFRENDAR:
- Dios abrirá las ventanas de los cielos y enviara bendición sobreabundante.
- Dios reprenderá al devorador de nuestra provisión.
- Seremos bienaventurados y tierra deseable.
- Debes también pedir al Señor Jesús un corazón generoso, que aprenda a dar, primeramente a Dios, pero también al necesitado, al pobre, a la familia y demás personas que lo necesiten.
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4. MAYORDOMÍA DE LOS HIJOS:
Son nuestra herencia y el bien más preciado que tenemos, debemos amarlos, bendecirlos, cuidar sus almas y suplir sus necesidades materiales y afectivas, también debemos corregirlos con firmeza y amor. Un gran líder de Israel dijo:
“pero yo y mi casa serviremos a Jehová.”Josué 24:15.
- ¿Cómo debes cuidar de ellos?: * Lee Efesios 6:1-9
- Con amor y disciplina. Por favor lee Proverbios 13:24 - Proverbios 29:17
- Levantando un altar de oración en tu casa al menos una vez a la semana. Reúnete con tus hijos y lee la Biblia con ellos, bendícelos y oren juntos por sus necesidades.
- Sé ejemplo para ellos ya que los verdaderos valores se forman en casa. De nada sirve si eres un mal testimonio para tus hijos y si has fallado pídeles perdón, así ganaras autoridad para corregirlos y guiarlos.
- Conviértete en su mejor amigo y conoce sus amistades, gánate su confianza y sé un verdadero apoyo para tu hijo.
- Por último preséntaselos al Señor en la iglesia y procura que el Pastor ore por tus hijos. Bendícelos con palabras de salud y prosperidad ya que como autoridad puedes desatar bendición sobre tus hijos.
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Dios es el dueño absoluto de todo, como lo dice el
Salmos 24:1-21